Cuando instalas una puerta enrollable comercial esperas que funcione de manera eficiente para que tu negocio puedas operar sin interrupciones. La mejor manera de evitar problemas comunes con las puertas enrollables comerciales es mediante una instalación adecuada.

Algunas razones por las cuales tu puerta no abre correctamente las analizaremos a continuación:

Las obstrucciones pueden ser objetos físicos o incluso partículas de polvo y suciedad. Al investigar por qué su puerta enrollable está atascada, ninguna opción es demasiado extrema para explicar por qué no se abre o no se cierra. Las partículas pequeñas pueden acumularse fácilmente y convertirse en suciedad adherida que interfiere con el funcionamiento de la puerta. Una obstrucción física como un trozo de material suelto es bastante fácil de eliminar. Eliminar la suciedad y la mugre requerirá un poco más de esfuerzo.

A medida que los componentes envejecen, pueden dificultar la apertura de la puerta enrollable y eventualmente requerirán reemplazos. Los resortes de torsión y los cojinetes son elementos habituales del desgaste de las puertas basculantes.

Las placas de soporte de los extremos desgastadas pueden atascarse, impidiendo el movimiento y desalineando la puerta. Puede detectar cualquier signo de desgaste alrededor de las placas de los cojinetes de los extremos si encuentra polvo negro o polvo alrededor del componente, lo que indica metal rozando contra metal.



Capós, fascias y rieles desalineados o guías demasiado apretadas pueden hacer que la puerta roce las guías, lo que puede causar daños a la propiedad y quitar la pintura de los paneles. Este problema afecta tanto a la calidad estética como al rendimiento de la puerta. Este tipo de situación es algo que usted desea evitar siempre que sea posible: un problema es más fácil de resolver que varios.